viernes, 9 de octubre de 2015

Gans Baai- El Gran Tiburón Blanco-

        
Amanecer en Gans Baai

                           Después de estar un día entero en ruta desde las Montañas Drakensberg a Durban con cuatro horas de camión y desde allí en avión hasta Cape Town y otras tantas horas hasta Hermanus, donde hemos pasado la noche. Ha llegado el gran día, el momento que todos estábamos esperando, ir a "Gans baai" y poder ver al GRAN TIBURÓN BLANCO. Aventureros de todo el mundo viajan cada año a Sudáfrica atraídos por una oportunidad sin igual: observar al gran tiburón blanco en su hábitat natural. Es común en las aguas de "Gans baai", una pequeña localidad ubicada en la costa oeste de Sudáfrica a unos 200 km de Ciudad del Cabo, que es conocida como la capital mundial del tiburón blanco. De su puerto zarpan cada día embarcaciones desde donde avistar a este gran depredador, bien desde la cubierta o en una Jaula de seguridad sumergida en el agua para experimentar una mayor cercanía con el mayor depredador marino. Esta actividad se puede realizar durante todo el año, siempre que la meteorología lo permita. Imagina un encuentro cara a cara con el animal más temido de los Océanos,  sin duda es una experiencia para el recuerdo y que difícilmente vas a poder olvidar en la VIDA.

Nuestro Barco "Barracuda"
Con las jaulas para tiburones


Nos tenemos que levantar muy temprano (4:30 de la mañana) pero nos da igual todos estamos deseando encontrarnos con este magnifico y poderoso animal.  Disfrutamos de un espectacular amanecer mientras tomamos un ligero desayuno para evitar posibles mareos y vamos a realizar la ruta con "Shark Diving unlimeted" de  Mike Rutzen que es uno de los pocos especialistas de la materia que nadan junto al tiburón blanco sin Jaula, vemos que el Centro de Buceo esta lleno de fotos con famosos que van desde Nelson Mandela, Leonardo Dicaprio, Matt Damon, y de la actriz Halle Berry cuando estuvo rodando "Marea Letal", película sobre los tiburones blancos que se desarrolla en las inmediaciones de "Gans Baai". Partimos en medio de un silencio expectante al divisar el que sera nuestro barco "Barracuda" junto con las Jaulas para los tiburones. Navegamos por el Atlántico para encontrarnos cara a cara con el tiburón blanco. Tenemos la enorme suerte que durante la travesía aparecen un grupo de delfines y nos van a acompañar un buen rato haciendo, lo que provoca las delicias de todos, pero sabemos que si hay delfines no hay tiburones. Es muy temprano y empiezan a preparar el señuelo de foca falsa, para provocar el ataque de los tiburones y ver un patrón de caza único en el mundo: tiburones de más de tres metros impulsando todo su cuerpo fuera del agua y así poder disfrutar de un autentico espectáculo de la naturaleza que se conoce con el nombre de "Breaching Sharks".                                                                       

Desgraciadamente no tenemos suerte aunque ya nos habían avisado de que no era la época y de que sería difícil, a pesar del bajón no nos desanimamos porque vemos que inmediatamente van preparando en unos cubos grandes el señuelo para atraer a los tiburones. Este señuelo esta compuesto por tripas, y cabezas de pescados junto con un conglomerado de lo que suponemos que es sangre pero que tiene un olor fuerte y desagradable pero que seguro que a los tiburones les encanta. Se suelta la Jaula para los tiburones donde vamos a entrar. No se puede expresar la sensación que sentimos al ver al primer tiburón blanco merodeando por los alrededores de nuestra embarcación, es algo único y a la vez te crea expectación y emoción, no perdemos tiempo y nos empezamos a poner los trajes de neopreno serán las seis de la mañana y nos dicen que la temperatura del agua ronda los 15 grados. Nos metemos en la Jaula y ya estamos todos listos para que el tiburón blanco se vaya acercando a la vez que le van echando el Cebo.

Tiburón merodeando la jaula
Con el experto

Saltando con el cebo













 

No se puede explicar la sensación al ver a este magnifico animal tan de cerca y en movimiento, lo cerca que pasa de la Jaula y alguna que otra embestida, en un momento pasa por nuestro lado mordiendo el señuelo y da un golpe en el lateral de la Jaula que se mueve como si nada, nos demuestra la gran fuerza que tiene, todos estamos encantados y creo que sufren más los que se han quedado arriba en el barco que nosotros. Pasa el tiempo y algunos compañeros van notando el frío y aunque la mañana va pasando la actividad dura dos horas, pero yo al igual que otros no nos queremos mover de donde estamos, queremos saborear hasta el ultimo momento el encuentro con el Gran Tiburón Blanco. Con cada paso por la Jaula y el señuelo, se ve en la cara nuestra satisfacción por el momento vivido y lo recomiendo desde aquí a cualquier persona que le gusten este tipo de sensaciones y sobre todo si tiene fascinación por los TIBURONES.
Tiburón atacando
El Gran Tiburón Blanco
 
Nos avisan que ya queda poco y que va siendo hora de ir saliendo pero justo antes de este momento ocurre algo inesperado el tiburón blanco ataca con fuerza el señuelo y en un momento pasa por toda la Jaula con la inmensidad de su tamaño y tan cerca que todos estamos emocionados, los pocos que quedamos en la Jaula y los que están en el barco que han sentido la cercanía y emoción del momento vivido....FANTÁSTICO....no se podía poner un final mejor. Salimos con la sensación de que estos momentos los recordaremos durante el resto de nuestras vidas y con una sensación de euforia y de adrenalina a tope. A pesar de todas las experiencias y cosas maravillosas que hemos visto, esto lo supera con creces y nuestras caras son el reflejo de lo que estamos viviendo. Subimos al barco y comentamos todas las experiencias y las pasadas que han echo los tiburones a lo largo de la mañana, comparando también como lo han visto desde el barco, los abrazos y las expresiones de continua alegría no dejan de sucederse.












Nos vamos secando y volvemos al Centro de Buceo todavía con mucha emoción y los últimos sin quitarnos el traje de neopreno ya que así tendremos menos frío. Al llegar al destino nos espera una sorpresa más, porque nos duchamos en el Centro de Buceo con una ducha caliente reparadora, aunque para terminar de reponernos nos sirven una sopa caliente que nos sienta de maravilla, a la vez que nos muestran el video de la actividad que no dudamos en comprar. Terminamos la actividad encantados y emprendemos camino hacia la localidad de Hermanus para comer y desde allí ir a ver a las ballenas, pero sin poder dejar de pensar en las maravillosas experiencias y sensaciones que hemos vivido. Este día sin ningún tipo de dudas lo voy a tener grabado para siempre en la retina y en mi memoria. YO ESTUVE ALLÍ...

* Para la elaboración y desarrollo de este artículo se han tenido en cuenta los datos obtenidos a través de wikipedia, y las propias experiencias vividas durante el viaje.

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